-Sí, eso dicen.
-¿Solías estar mucho con ella?
-No, jamás la veía. Siempre estaba aquí en Londres.
Sirvió el desayuno a la niña y se sentó con ella en la mesa mientras le daba de comer a Mary.
-¿Aún no habla la bebé?
-No... Y dime... ¿Cómo te gusta que te digan, Sophi?
-Law. Mi familia me llama Law por Lawrence.
-Eres una niñita muy inteligente.
-Y no voy a la escuela- presumía la niña, mientras mordía su desayuno.
-Oye, quiero que nos llevemos bien, ¿sí, cariño? Es decir... No sé, podríamos salir a comprar un helado en la tarde. ¿Te gustaría?
La niña asintió con una sonrisa de oreja a oreja.
-Bien...- Alice tomó sus mejillas con una sola mano rodeando su pequeño mentón y le sonrió- Me iré a duchar...
Salió de ahí con Mary en brazos.
Paul estaba en el descanso de las escaleras, escuchando todo lo que decían.
-Buenos días- dijo secamente Alice.
-Hola, cariño...- A Paul se le caía la cara de pura vergüenza, se sentía muy mal moralmente por lo ocurrido el día anterior. La indiferencia de Alice lo partía en dos.
La siguió hasta la habitación mientras veía que alistaba su ropa.
-Hoy... hoy iré al estudio. Creo que saldré tarde.
Alice no respondió, sólo se encogió de hombros.
-Pero, me gustaría platicar
-¿Con quién?
-Contigo, obviamente.
-¿De qué?
-Alice...
La chica se metió al baño y se desvistió mientras Paul se recargaba en el marco de la puerta.
-¿Te gustaría ir a... no sé, cenar? ¿Salir?- le preguntaba.
-¿Crees que me gustaría?
-No, pero... podría ser buena idea.
-¿Cuándo?
-Mañana. En la noche. Podríamos ir al cine.
-Qué interesante- dijo sarcástica- Oye, ¿puedes cerrar la puerta? Me quiero bañar...
-Sí... Lo siento...- Paul salió y cerró la puerta.
Como Alice lo había prometido, esa tarde salió con Law y Mary a dar un paseo. Fue incómodo al principio pues miles de cámaras le tomaron fotos saliendo de Cavendish Avenue.
Pero después todo fue relajado. Alice intentaba conversar con Law pero la niña era demasiado tímida.
Era una niña encantadora, era tan blanca como Aime y su cabello, ondulado, era tan castaño como el de Aime, era un cabello muy, muy claro, si fuera un poco más claro, sería rubia. Tenía ojos azules como Alice y como Aime. Era realmente encantadora.
Se sentaron en la banca de un pequeño parque.
-¿A quién esperamos?- preguntó la niña.
-A mi hermana... - Alice buscaba con la mirada hasta que a lo lejos pudo ver que Eleanor venía hacia ella.
-¡Hola!- saludo entusiasmada... Miró a la niña.
Esa tarde Alice pudo explicarle todo. Le pedía consejos, necesitaba una solución.
Mientras tanto, Paul no podía concentrarse en el estudio.
-¿Qué te pasa, hermano?- preguntaba John.
-Tengo problemas con Alice.
John se puso nervioso.
-¿Otra vez?- preguntó. Paul asintió.
-Adopté a una niña y Alice explotó.
John soltó una risotada burlona.
-¿Y cómo querías que reaccionara?
-Ese no es el problema, el problema es que discutimos y le dije cosas horribles.
-Pues no dejes que eso te afecte en el estudio porque estamos sacando de quicio a Martin.
Richard se acercó a donde ellos.
-¿qué pasa?
-Oh, nada, problemas.
-Te ves muy amargado. Deberíamos de irnos después de aquí a algún lugar.
-¿Como cuál, Ringo?
Como de costumbre, esa noche fueron a casa de Ringo con varias mujeres. Los cuatro, sí, los cuatro.
Estaban un poco drogados, un poco ebrios, un poco de todo.
Mientras escuchaban música y platicaban con las grupies, John no podía dejar de coquetear y tocar a la chica que tenía en sus piernas, de soslayo pudo ver que Paul hacía lo mismo, se estaban divirtiendo.
-Hey, Paul...- Éste volteó- Tengo que decirte algo...
-¿Qué pasa?- preguntó sonriente, mientras la chica que no tenía más de 18 años, acariciaba su cabello.
-Me acosté con tu esposa...- dijo, sonriente sin dejar de mirar a su acompañante.
-Law. Mi familia me llama Law por Lawrence.
-Eres una niñita muy inteligente.
-Y no voy a la escuela- presumía la niña, mientras mordía su desayuno.
-Oye, quiero que nos llevemos bien, ¿sí, cariño? Es decir... No sé, podríamos salir a comprar un helado en la tarde. ¿Te gustaría?
La niña asintió con una sonrisa de oreja a oreja.
-Bien...- Alice tomó sus mejillas con una sola mano rodeando su pequeño mentón y le sonrió- Me iré a duchar...
Salió de ahí con Mary en brazos.
Paul estaba en el descanso de las escaleras, escuchando todo lo que decían.
-Buenos días- dijo secamente Alice.
-Hola, cariño...- A Paul se le caía la cara de pura vergüenza, se sentía muy mal moralmente por lo ocurrido el día anterior. La indiferencia de Alice lo partía en dos.
La siguió hasta la habitación mientras veía que alistaba su ropa.
-Hoy... hoy iré al estudio. Creo que saldré tarde.
Alice no respondió, sólo se encogió de hombros.
-Pero, me gustaría platicar
-¿Con quién?
-Contigo, obviamente.
-¿De qué?
-Alice...
La chica se metió al baño y se desvistió mientras Paul se recargaba en el marco de la puerta.
-¿Te gustaría ir a... no sé, cenar? ¿Salir?- le preguntaba.
-¿Crees que me gustaría?
-No, pero... podría ser buena idea.
-¿Cuándo?
-Mañana. En la noche. Podríamos ir al cine.
-Qué interesante- dijo sarcástica- Oye, ¿puedes cerrar la puerta? Me quiero bañar...
-Sí... Lo siento...- Paul salió y cerró la puerta.
Como Alice lo había prometido, esa tarde salió con Law y Mary a dar un paseo. Fue incómodo al principio pues miles de cámaras le tomaron fotos saliendo de Cavendish Avenue.
Pero después todo fue relajado. Alice intentaba conversar con Law pero la niña era demasiado tímida.
Era una niña encantadora, era tan blanca como Aime y su cabello, ondulado, era tan castaño como el de Aime, era un cabello muy, muy claro, si fuera un poco más claro, sería rubia. Tenía ojos azules como Alice y como Aime. Era realmente encantadora.
Se sentaron en la banca de un pequeño parque.
-¿A quién esperamos?- preguntó la niña.
-A mi hermana... - Alice buscaba con la mirada hasta que a lo lejos pudo ver que Eleanor venía hacia ella.
-¡Hola!- saludo entusiasmada... Miró a la niña.
Esa tarde Alice pudo explicarle todo. Le pedía consejos, necesitaba una solución.
Mientras tanto, Paul no podía concentrarse en el estudio.
-¿Qué te pasa, hermano?- preguntaba John.
-Tengo problemas con Alice.
John se puso nervioso.
-¿Otra vez?- preguntó. Paul asintió.
-Adopté a una niña y Alice explotó.
John soltó una risotada burlona.
-¿Y cómo querías que reaccionara?
-Ese no es el problema, el problema es que discutimos y le dije cosas horribles.
-Pues no dejes que eso te afecte en el estudio porque estamos sacando de quicio a Martin.
Richard se acercó a donde ellos.
-¿qué pasa?
-Oh, nada, problemas.
-Te ves muy amargado. Deberíamos de irnos después de aquí a algún lugar.
-¿Como cuál, Ringo?
Como de costumbre, esa noche fueron a casa de Ringo con varias mujeres. Los cuatro, sí, los cuatro.
Estaban un poco drogados, un poco ebrios, un poco de todo.
Mientras escuchaban música y platicaban con las grupies, John no podía dejar de coquetear y tocar a la chica que tenía en sus piernas, de soslayo pudo ver que Paul hacía lo mismo, se estaban divirtiendo.
-Hey, Paul...- Éste volteó- Tengo que decirte algo...
-¿Qué pasa?- preguntó sonriente, mientras la chica que no tenía más de 18 años, acariciaba su cabello.
-Me acosté con tu esposa...- dijo, sonriente sin dejar de mirar a su acompañante.
No Me Jodas.
ResponderBorrarJohn eres un imbécil, ebrio y drogadoooooooooo, ok, me dejaste demasiado picada(? Por favor sube pronto, me voy a morir si no lo haces jajajaja ;(
¿Y ahora que hará Paul? La perdonará y lo olvidará? O la correrá? Cielos, en serio me voy a morir de la intriga jajajaja.
Uyyshshsshhh, ya cuando por fin Alice es normal jajaja John tiene que venir a caaaggggggrrrrllaaaa.
Cuídate mucho. Besos. Sube prontoooo. :'o
NO JODAS (SOY LUISA ELEANOR POR CIERTO XD) PUTO JOHN !!!!!!!!!!!!!!!!11 PUTO PAUL :'( PUTA GRUPIE JKSKLFLASKMDLQWEDQ NO JODAS CASI ME DA UN PUTO INFARTO CUANDO LE DIJO JOHN!!!!!! MALDITA ALICE EN QUE ESTABA PENSANDO U___U MIERDA, SUBES PRONTO QUE ESTOY INTRIGADISIMA *---*
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